La oferta de monitores que el mercado nos ofrece a los jugadores es gigante. Todo aquel que se haya sentado a realizar la búsqueda de su pantalla ideal habrá tenido problemas reales para encontrar una que cumpla con todas las características deseadas. Son demasiadas cosas a tener en cuenta y nosotros queremos echaros una mano.
No se trata de elegir aquel monitor que tenga el aspecto más llamativo o el que presuma de precio más alto. El sector de los monitores se ha especializado demasiado y ofrece pantallas ideales para el gaming. Hablamos de monitores diseñados para revolucionar nuestra experiencia de juego.
Elegir el monitor idóneo nos llevará a disfrutar de un movimiento más suave y, de manera indirecta, conseguir un control más preciso. Con estas condiciones, seremos más competitivos tanto en las partidas online como en el juego local.
Modelos como el OMEN 27i son el mejor ejemplo de esta tendencia, presentando y estrenando tecnologías que nos ayudan a ganar esa necesaria sensación de inmersión en los juegos. Toma nota de lo que necesitas y no dejes que una mala elección fastidie tus partidas.
Busca la más alta frecuencia de refresco
Qué importante es la frecuencia de refresco de nuestra pantalla, ya que se trata de un parámetro que nos indica la cantidad de imágenes por segundo que es capaz de presentarnos el monitor. Cada imagen por segundo es un hercio, de ahí que, cuando hablemos de esta especificación, nos ofrezcan los datos con esta medida.
Insistimos en la relevancia del refresco, cuanto más alta sea la tasa, más suave y fluido será el movimiento. A su vez, conseguimos que el control sea más preciso, así que todos son ventajas en el mundo gaming.
Los monitores OMEN 27i son un portento en esta característica, llegando a ofrecer 165 Hz. Una cifra que te puede hacer triunfar en ‘Fortnite’, ‘Valorant’, ‘Overwatch’ o ‘Counter-Strike’, juegos que requieren de mucha velocidad y precisión.
Apuesta por las tecnologías de refresco adaptativo
De poco sirve que nuestro monitor sea capaz de trabajar a una frecuencia de refresco de 165 Hz, si no se lleva bien con la tarjeta gráfica del equipo. La GPU tiene que ser capaz de mandar imágenes por segundo a ese ritmo tan grande y debe hacerlo de forma sincronizada.
Para conseguir esa sincronización entran en juego las tecnologías de refresco adaptativo. En el caso de NVIDIA, se llama G-SYNC y, en el de AMD, FreeSync. Afortunadamente los modelos OMEN cuentan con soporte para ambas tecnologías.
De lo que no cabe duda es que con monitores como los nuevos OMEN 27i, que están preparados para el futuro, podrán recibir equipos con mucha más potencia gráfica.
¿Qué es el tiempo de respuesta?
El tiempo de respuesta es otro parámetro vital en el funcionamiento de un monitor, más aún en contenidos que se mueven a alta velocidad como juegos o vídeos. Refleja lo que tarda un píxel en cambiar el color que está emitiendo, cuanto más rápido lo haga, más definida será la imagen.
Principalmente, se mide indicando el GtG (Grey to Grey), que es el tiempo invertido por un píxel del panel en emitir el color gris, pasar a blanco y volver a emitir el color gris. En el caso de los monitores OMEN 27i, hablamos de 1 milisegundo, que es una cifra espectacular para la calidad del panel.
Lo último en tecnología IPS para un monitor redondo
Los monitores OMEN son muy rápidos, ya lo hemos comprobado con sus especificaciones, pero es importante conocer qué calidad de colores y definición son capaces de representar.
En el caso del OMEN 27i, nos situamos en un peldaño superior en tamaño y tecnología de panel. Como su nombre indica, subimos a las 27 pulgadas, con una resolución QHD en un panel con tecnología Nano IPS. Es capaz de ofrecer una increíble reproducción de color DCI-P3 del 98 %.
El panel IPS que utiliza es excepcionales a la hora de representar colores, pero también destaca por sus amplios ángulos de visión y contraste. Sin olvidarnos de la rapidez que hemos tratado en puntos anteriores: un monitor redondo, sin puntos débiles.
Diseño gaming, diseño para todos
El trabajo de diseño de un buen producto tiene dos caras, ganarnos por lo estético y mejorar en lo funcional. En el mundo gaming, se ha generalizado la idea de que cuánto más llamativo, mejor para los jugadores, algo que claramente es un planteamiento erróneo.
Está muy bien que monitores como el OMEN 27i cuenten con sistemas de iluminación RGB para personalizar nuestro espacio de juego. No obstante, en líneas generales, su diseño es bastante elegante, incluso discreto, para que todo tipo de usuarios pueda integrarlo con facilidad.
Sobresalen especialmente por sus ajustes, pudiendo subir y bajar en altura la pantalla hasta 130 milímetros. También podemos jugar con el rango de inclinación en 5 grados y el giro de pantalla en 20 grados.
Los marcos son realmente finos, con un diseño que invita a colocar varios monitores juntos. El cuerpo está fabricado en un material metálico, que le da robustez a la hora de manipularlo.
Repleto de puertos
Hoy en día, los puertos de conexión escasean, sobre todo, si tu equipo principal es un portátil. Es posible arreglar la situación con accesorios, pero es una solución que implica tener más gadgets y cables de por medio.
Lo mejor es apostar por monitores que ofrezcan todo un hub de conectores, como ocurre con los OMEN 27i. Un arsenal de conexiones que nos permitirá usar al mismo tiempo nuestro PC, la consola y cargar el teléfono. Aprovechando su tamaño, nos encontramos con un HDMI 2.0, un DisplayPort, conector para auriculares y tres puertos USB 3.0.
Control total con Omen Gaming Hub
Las posibilidades de configuración y personalización de los monitores OMEN es muy alta, para ello, se ha creado una potente herramienta llamada Omen Gaming Hub. Desde ella, vamos a poder controlar los siguientes aspectos:
- Iluminación. Siempre es posible encontrar el esquema de color perfecto para tu zona de juego. Juega con los 16,8 millones de colores, incluso podemos introducir animaciones lumínicas.
- Modo Picture. A todo el mundo no le gusta la misma configuración de color y temperatura, con esta opción, podemos elegir los parámetros óptimos y personalizados.
- Modo Performance. ¿Curiosidad con las imágenes por segundo que consigue tu tarjeta gráfica? Los monitores OMEN te presentan el dato en tiempo real.
- Punto de mira dinámico. Para una óptima visualización del punto de mira en juegos, el monitor puede cambiar automáticamente su color y forma.
Nuestra competición depende de los mejores accesorios
Junto al monitor, el ecosistema perfecto de juego es muy fácil de imaginar. En él, podemos introducir un sobremesa OMEN 30L con una incomparable GeForce GTX 3090 y un monitor OMEN 27i, pero nos falta el sistema de control ideal. Fácil, OMEN ha pensado también en esto.
Si queremos competir al máximo nivel debemos priorizar en teclados y ratones de calidad, periféricos que marcan la diferencia. Tampoco nos podemos olvidar de la comunicación.
OMEN Spacer TKL
El teclado gaming para los que no quieren cables de por medio: la tecnología inalámbrica Warp proporciona en cada partida una conexión fiable y constante de 2,4 GHz con tecnología Zero-Lag. Aunque, si lo prefieres, siempre puedes apostar por la opción con cable.
Obviamente, para funcionar sin cables hacen falta unas buenas baterías, como las elegidas por OMEN, que permiten jugar durante 75 horas de forma ininterrumpida. Como se puede apreciar en las imágenes, es un teclado compacto, con iluminación y dispone de un cómodo reposamanos magnético.
Destaca por el uso de conmutadores CHERRY MX en sus teclas, con un tiempo de respuesta de 1 milisegundo y la garantía de 100 millones de pulsaciones. Con N-Key rollover, puedes pulsar todas las teclas que quieras a la vez.
OMEN Vector
¿Buscas ratón inalámbrico? OMEN Vector es el modelo gaming con la carga más rápida del mercado, a través de USB-C. Con 30 segundos enchufado a la alimentación, conseguimos una hora de juego. Una carga completa supone 180 horas de uso.
El ratón también hace uso de la tecnología inalámbrica Warp con conexión de 2.4 GHz. Presume de una definición de 16000 DPI gracias al sensor inalámbrico Pixart PAW3335, y de botones mecánicos Omron, con una vida útil de 50 millones de clics.
OMEN Blast
Si buscamos el accesorio que sea complemento ideal del monitor para la inmersión en el juego, tenemos que mirar hacia los auriculares. Modelos como los OMEN Blast generan un sonido envolvente 7.1 que transforman el audio en una experiencia de 360 grados.
Para generar un sonido de máxima calidad, se emplean unos controladores de 53 milímetros de tamaño, e incorpora un DAC USB de 24 bits.
No solo son realmente cómodos para partidas largas, también nos facilitan el control gracias a los botones de volumen en el propio cable, para que no apartes la vista de la pantalla. El micrófono unidireccional es retráctil y cuenta con cancelación de ruido, de modo que solo se escuche tu voz.
OMEN Mindframe Prime
Para aquellos que sufren del calor en las largas sesiones de juego, OMEN ha desarrollado estos auriculares con tecnología de refrigeración activa FrostCap, con tres niveles de actuación. Las almohadillas con tecnología de refrigeración pasiva también alejan el calor de la piel.
Llama la atención, además, por su excelente y cómodo diseño con diadema de suspensión autoajustable. Disfrutamos del mejor sonido envolvente 7.1 gracias a la tecnología C-Media Xear. Con ella podremos identificar de dónde vienen los disparos.
Y es que para lograr una completa inmersión, no todo depende del equipo y el juego.